domingo, 23 de febrero de 2020

Porque soy libre


Hay momentos en la vida que sacuden tanto que no se olvidan. Huellas imborrables. Te zarandean. Te empapan. Te arrasan. Juegan contigo. Pierdes el volante. Momentos en los que, de repente, cuando todo termina, lo mundano funciona a otro ritmo. Jugando a pie cambiado. Un intruso en la realidad.Todo se mueve demasiado. Y es que, en realidad, sigues en la lona, asimilando, recluso del golpe. ''Vida Oculta" ha sido de unos momentos. 

Es un viaje diferente. No esperes fuegos artificiales. No esperes vibrar. No esperes emotivismos. No esperes movimiento. Ya he mencionado que es un viaje diferente. Y, por eso, va a otro ritmo. Un ritmo pausado que te va calando indeleblemente hasta ser su preso. Y ese es el primer paso: para poder entrar, hay que frenar. Liberarse de los perjuicios. Abrir el alma. Escuchar desinteresadamente. Y, sobre todo, dejarse llevar para saborear.

"Vida Oculta" es una película cuasi muda. Básicamente porque no requiere gastar esfuerzos en palabras. El testimonio de su protagonista sirve como yugo para transmitir el mensaje. Ensalza la victoria de la coherencia, la valentía, la paz y la integridad. Es el pulso de la verdad de un hombre contra la mentira de un mundo. Un pulso que, curiosamente, nace del respeto. En primer lugar, del respeto a sí mismo. A lo que se refleja en el espejo cuando se afeita. A lo que ve, y verá, Dios. A su conciencia, a sus principios. Pero también del respeto al que piensa diferente. No juzga, no señala. Efectivamente, no va a cambiar al mundo corriendo a contracorriente. No quiere erguirse como una autoridad de nada. Porque no lo sabe todo. No busca nada de eso. Busca, secillamente, ser fiel así mismo. Porque soy libre, caiga quien caiga. Y porque es mejor sufrir una injusticia que ser el responsable de ella. 

"Vida Oculta" es cruda. No busca dar respuestas fáciles, no busca atajos. Busca, a través de la honestidad olvidada del campo que te cuestiones, que te muevas. Reivindica la importancia del proceso. Busca sembrar. Proliferar, dar fruto en abundancia. Y es que la verdad nace así. Tras airear, tras abonar, tras rastrillar, tras labrar, tras sembrar, tras regar. Sin saltarse pasos. La victoria de lo imprescindible, la victoria de la humildad. 

Creo que "Vida Oculta" es todo esto porque condensa, fielmente, la inabarcable definición de belleza. Desde su forma, con su fotografía, hasta su contenido, con su mensaje. Y es que la belleza embriaga. No hay manera de definirla, aunque sí de reconocerla. Es una percepción muy profunda. Ahí donde no hay espacio para colores. Pero es tan profunda, es tan trascendental, que sabes con toda tu alma que es verdad, que está ahí, delante de ti. Como la fe, como Dios. Caiga quien caiga. ''Vida Oculta" es igualmente la reivindicación de la importancia de la cultura. Ese arte, sea del color que sea, que subversivamente nos remueve. En este caso, a un ritmo al que no estamos acostumbrados, pero del que evidenciamos una manifiesta carencia. Una película lenta y sin sentimentalismos que no busca alfombras rojas.

Nada más. Vayamos al cine. Consumamos cultura para poder consumir vida.

Fuente de fotografías: https://m.imdb.com/title/tt5827916/mediaviewer/rm3015612929